No
me provoques tía, que sabes lo que nos estamos jugando. Cuando esto
salga a la luz, que me temo no tardará demasiado, se montara una de
pelotas y ya veremos que y como nos excusamos. A lo tonto pero, ya
nos metemos mano en tu propia casa a unos metros escasos de tu vieja.
__
¡No, no puedo quedarme!, ¡me
voy ya!, quiero hacer algún viaje y aprovechar el turno de noche,
hoy preveo buenos servicios y a lugares variados de la ciudad. ¡Vamos
buenas cifras de taxímetro!
En
el Tívoli__ siguió
argumentando__,
pasan una revista musical, con Paco
Moran y su cuadrilla,
buenos actores y comediantes, que atrae a muchos de los posicionados
de la ciudad y esos van y vienen a sus casas y donde sea, en taxi, ya
ni se cansan en conducir, ni de presumir de grandes coches, buscan
comodidad y pasar desapercibidos. Además dan buenas propinas.
__
Me vas a abandonar esta noche_, le
dijo con voz chunga de gata erizada__,
que podríamos pasarlo tan a gusto, sin que nos moleste nadie, en un
ambiente sosegado y tan ricamente placentero.
__
Lo siento pero no me es posible, tengo otras obligaciones que no
puedo dejar de cumplir y me espera una larga carrera de viajes con
clientes que me aportan buena facturación.
__
Entonces me dejas así cachonda perdida__ le suplicó sin éxito__,
cuando volverás a por nosotras, bajamos el domingo por la noche,
pero cuenta que para entonces Pilar ya estará aquí en la
urbanización.
__
Vendré a buscaros a media tarde, os bajo a vuestra casa, sin prisas
cuando todos los domingueros retornan con la retención consabida
para sus hogares, y ya veremos entonces.
Abrieron
el portón de aquel garaje, y lo cerraron tras ellos.
Se
detuvieron frente al sauce frondoso, que tenían plantado frente a la
entrada del jardín de la vivienda, a pesar de la poca luz que
ofrecía la noche. Se besaron ya furtivamente y subieron las
escalinatas.
Silverio
acompañaba a Xita cogida por la cintura, cuando llegaron al portal
ambos ya predispuestos entraron como aquellos que no habían roto un
plato al salón donde estaba la madre para despedirse, con la
educación que le caracterizaba.
__
Bueno Xarme, me marcho al trabajo, que esta tarde no he hecho nada de
provecho.
__
¡Estas seguro que no has hecho nada!, menudo truhán estás hecho
tu detrás de esas gafas de culo de botella y decirme así tan
alegremente que nadie se ha aprovechado de ti. Es
una falacia enorme __ preguntó con sorna la abuela a Silverio,
¿Sabes que quiere decir falacia?
El
hombre no contestó, fue la hija la que reprobó los modos de la
madre y quiso enmendar aquel diálogo con una ayuda para su amigo__
ella quiere decir, que todo es prácticamente una falsedad y
realmente no has hecho nada esta tarde, solo traernos hasta la
urbanización.
Silverio,
quiso rizar más el comentario y con una risita de esas que hacen
consecuentes a los desinformados, le respondió a la abuela, que se
los miraba con severidad.
__
No sé, eso pregunteselo a su hija__ No
supo ni repetir la palabra, ni contestar a la pregunta__
a ver que le contesta, que
Xita tiene respuestas siempre__
dijo con mucha seguridad el hombre, riendo y creyendo que no sería
interrumpido en su chiste.
Hasta
que fue entrecortado de forma agradable pero un tanto brusca
por lo inesperado. Anunciando pausadamente con voz liviana y trémula,
aquella mujer que cerraba en aquellos instantes, su novela de
aventuras y depositaba sobre la mesilla.
__
Crees que soy tonta, o es que piensas que me he dormido mientras te
follabas a mi hija, ahí abajo entre el coche y la oscuridad, como si
fueseis dos perros callejeros, pudiendo joderla encima de su cama,
que siempre hay mas higiene y comodidad__ continuó la anciana
preguntando__ ¿De quien ha sido la idea?, porque a ella, la vengo
oliendo desde hace horas que está encendida y, ya hace días tenía
previsto hacerte una encerrona para que la abordaras.
Se
quedaron los dos mudos, sin saber que decir. La
madre, siguió mirándoles con pena ya para sus adentros y viendo
que no abrían la boca, continuo
hablando__, que sepáis que yo parezco
ciega, muda y sorda, sin
serlo. ¡Así que!, cuando
aprieten
las ganas y
os entre el
anhelo
por
ese
retozar,
usar la cama sin esconderos. Vosotros ya no engañáis a nadie, ni
tampoco
sois
niños para saber cuando se está fuera de juego, cuando se perfila
el engaño y cuando se han de tener asumidas todas
las
consecuencias.
¡Todas
porque a
la larga es peor!
0 comentarios:
Publicar un comentario