aquella
que bailamos arrimados
en
un tiempo que solo enamorados,
apretarnos
el cuerpo ¡Ni me acuerdo!
Por
qué acabó la historia; en desacuerdo
y
sin música, tan desesperados
besando
tu
bolero y agarrados,
para
sentir tu carne que remuerdo.
Nuestro
tango apretado, mordisqueando
tus
labios sin poder tragar sesgada
Mientras
tu ya gozabas y sudando,
en
el suelo entre piernas embragada,
sin
vaivén excitada, y ya flaqueando.
Quisiste
sucumbir,
¡Tan
empapada!
0 comentarios:
Publicar un comentario