Hace mucho que no te veo mi amigo,
será por la pandemia que vivimos,
por esta sinrazón. Ni coincidimos.
Ni tropezamos. ¡Esto es un castigo!
No veo a mis hijos. Siendo a los que abrigo,
por los que debo estar, y consentimos.
Con amor natural, sobreañadimos,
un amparo, que no siempre consigo.
Mi amigo; pienso en como nos aflige
ésta situación tan inesperada
sin miedo por mi. Si el virus me elije.
Sin embargo me temo camarada
que aun no acabó en su desvalije
lamentando una ruina encadenada.
0 comentarios:
Publicar un comentario