Es un misterio
ni atino, ni acierto,
este pensar injusto.
¡Carente, imperfecto!
Protagonista barato
de un mundo lerdo.
Descartando el relieve
de estar satisfecho
¡Si Dios me castiga!
Por no estar de
acuerdo.
Sepan ustedes, ¡Los
críticos!
Quise cambiar el
proyecto.
Con tantos pueblos
inmersos,
pasando penurias en sus
adentros,
sin atenderles, ¡Miren
sus bolsillos!
Los que beneficiarse
pudieron.
¡Y ahora qué!
Como prosiguen mis
días
esos de esclavitud
desordenada.
¡Otra fantasía soñada!
¿A quién le damos la
culpa
de este invento?
¿Hombres formales?
Demostraron, no serlo.
Decisiones
equivocadas,
rinden culto en cabeza
vana.
Cuenta nos damos
ahora,
fueron erradas.
Políticos mal llamados
gobernando el pueblo,
¡Miremos el porqué! y
el ¿Cómo?
¡Quien los ha puesto!
Ilusión me falta,
en el inicio de mi marcha,
para seguir paciente
y a cambio, no pensar
en nada.
La Curia; con caducos
consejos,
dicen regir, la ley
del cielo.
Sin salvar, ni penar
por ello
¡Bien rechonchos!
Rezando Credos.
¿Quién se salva de este
Clero?
¿Cómo nos protegeremos
de políticos?
¡Tan corruptos,
podridos y necios!
¡Que responda el
pueblo!
¿Quién aliviará este
yerro?
No importa la raza, ni
el rezo.
¡Qué repartan un poco
de heno!
Y practiquen con el
ejemplo.
Agonía en descubrir
mundos nuevos,
¡Quien asentará; en este ¡El nuestro!
¡Aún hay quien pasa
hambre!
¡Y por ello muertos!
¡Llorar no puedo!
Motivos no faltan.
Quejarme sería injusto,
con los privilegios
que tengo.
1 comentarios:
Certeros versos.
Persevera.
Saludos.
Publicar un comentario